Comercio Exterior, TLC y Lavado de Activos
En vista de la cercanía de la implementación del tratado de libre comercio denominado DR-CAFTA, y de las recurrentes informaciones salidas en la prensa nacional acerca de alijos de drogas narcóticas saliendo en contenedores desde los muelles dominicanos, me mueve a reflexionar que muchas ventajas que pudiéramos obtener del mismo, se verían frustradas o algunos procedimientos serían burocratizados, debido a que el país pueda ser incluido en una especie de lista negra por lo anteriormente señalado.
El problema se agudiza cuando se incluye el tema del terrorismo, que junto al lavado de activos, son trabas reales al comercio internacional, más cuando uno de los países miembros del acuerdo comercial tiene debilidades estructurales que lo hacen ser blanco fácil a este tipo de situaciones.
Uno de los procedimientos que se están utilizando como forma de lavado de activos, es utilizar los mecanismos de subvaluación y sobrevalución de productos o servicios que son legítimamente exportables, sin embargo se utiliza el diferencial de la venta con el fin de cobrar o pagar comisiones de blanqueado.
Aunque suene un poco alarmante, no solamente debemos estar preparados para competir internacionalmente en cuanto a estructura de costos, mano de obra especializada, desarrollo de clusters donde existan ventajas comparativas y competitivas, entre otros factores, sino debemos preocuparnos que no se nos creen barreras no arancelarias por la permisividad de nuestras instituciones (públicas o privadas) ligadas al comercio exterior.
El problema se agudiza cuando se incluye el tema del terrorismo, que junto al lavado de activos, son trabas reales al comercio internacional, más cuando uno de los países miembros del acuerdo comercial tiene debilidades estructurales que lo hacen ser blanco fácil a este tipo de situaciones.
Uno de los procedimientos que se están utilizando como forma de lavado de activos, es utilizar los mecanismos de subvaluación y sobrevalución de productos o servicios que son legítimamente exportables, sin embargo se utiliza el diferencial de la venta con el fin de cobrar o pagar comisiones de blanqueado.
Aunque suene un poco alarmante, no solamente debemos estar preparados para competir internacionalmente en cuanto a estructura de costos, mano de obra especializada, desarrollo de clusters donde existan ventajas comparativas y competitivas, entre otros factores, sino debemos preocuparnos que no se nos creen barreras no arancelarias por la permisividad de nuestras instituciones (públicas o privadas) ligadas al comercio exterior.
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